4 de octubre de 2022

¿Cómo afecta el empaque al café de especialidad que compras?

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El empaque del café que llevas a casa es un producto diseñado para ser atractivo pero ¿te has preguntado si sus características prolongan la calidad de tu café para que lo puedas disfrutar hasta el final?

Durante y después de la pandemia del COVID-19, el consumo de café tostado ha aumentado significativamente y, con ello, la cantidad de consumidores que toman conciencia sobre la calidad. Ahora, muchos eligen un café con el que se identifican ya sea por su diseño, origen, comunidad, variedad, tipo de tueste, comercio justo o propuesta de marca.

Cuando hablamos de comercio justo, en lo primero que solemos pensar es en el productor y en pagar mejores precios de los que conseguiría en los mercados commodity; sin embargo, a la hora de hablar de comercio justo también es importante pensar en el consumidor o en el cliente final, el último pero no menos importante eslabón de la cadena de valor, quien paga por los procesos de transformación del producto.

Además de las condiciones del almacenamiento del café verde, que son de importancia vital para la calidad y cuidado del café durante el tiempo que se guarde antes de ser tostado, los tiempos de estabilización y la importancia de conservarlo fresco por más tiempo, la conservación del café tostado, su empaque y almacenamiento son otros puntos clave. 

Para profundizar en este tema, hablé con Ronaldo Hurtado, barista en Café Cultor, y con Juan José Jaramillo, tostador y catador de café. Continúa leyendo para conocer qué me dijeron. 

Lee también: Tostador: cómo comunicar tu marca de café a través del empaque

Bolsas de café

¿Por qué las personas compran café en las cafeterías?

Las cafeterías, más allá de ofrecer bebidas y café en grano o molido, son espacios que crean comunidad y que guían a los nuevos consumidores para aprender a distinguir y elegir un café de especialidad. Es decir, a crear un hábito de consumo.

“Las personas siempre quieren llevarse algo con ellas y en la industria nos preocupamos por saber qué le damos a los demás para que se lleven a casa, sea algo tangible o intangible, como llevar un regalo o la experiencia de tomarse su café favorito”, dice Ronaldo Hurtado. 

En ese contexto, el branding y el merchandising son clave a la hora de promover el café de especialidad, por eso, en palabras de Juan José Jaramillo: “la bolsa es como una vitrina”. Así, el empaque del café tostado es una manera de hacer ver al café de forma más atractiva, familiar y humana para conectar con los consumidores e influir sobre sus decisiones de compra.

¿Conservar la calidad del café tostado aumenta los costos?

En la opinión de Juan “no es necesario aumentar los costos para mantener la calidad del café porque se debería orientar al cliente a comprar lo que va a consumir durante un tiempo, hay que pensar en incentivar un consumo de productos frescos y a la vez divulgar lo que consideramos que es producto fresco”.

“En origen muchas personas no están dispuestas a pagar por la calidad del café, entonces incrementar el costo de una bolsa de café en pro de mantener la calidad es algo que tal vez el consumidor no va a apreciar y para las marcas no sería rentable o no generaría un punto de equilibrio”, argumenta Juan.

Por su parte, Ronaldo dice que “el empaque debe dar una buena impresión visual para el cliente y luego tener la expectativa de que lo hay adentro es igual de bueno. Pasa que hay cafés muy buenos con empaques poco atractivos o empaques que pueden ser muy atractivos pero que el café que hay adentro no es tan bueno. Es importante darle al cliente una idea de qué se va a tomar y que además el empaque conserve el café por un buen tiempo”.

Finalmente, lo primordial para las marcas es promover la educación de los consumidores para que entiendan por qué cada café es diferente y qué pueden esperar de cada uno. 

Empaque de café tostado

¿Cómo elegir un buen empaque para el café?

Al hablar de empaques, hay muchos diseños y estilos de bolsas, latas, cajas y demás ideas creativas e innovadoras, con válvulas para desgasificar o al vacío. Por eso, es importante comunicarle al cliente los tiempos de carencia del café tostado, es decir, en qué punto tiene una mejor expresión o en qué punto su sabor se comienza a degenerar para que siempre tenga una buena experiencia.

“Lo que más afecta al café es el oxígeno, la luz y la humedad. Para mantener el café es bueno contar con una bolsa que tenga un zipper, una válvula desgasificadora o un peel and stick para volver a cerrar la bolsa y evitar, en lo posible, el contacto con estos factores”, dice Juan.

“El empaque es algo que va muy ligado con hacia dónde quieres que vaya orientado tu mercado de café tostado. Por ejemplo, tenemos la percepción de que en países productores hay café fresco todos los días y que los clientes van a consumirlo en menos de dos semanas, por eso, no es necesario tener mucha investigación o desarrollo de nuevos empaques”, dice Ronaldo.

Por otra parte, “si tratas de expandir el mercado o el café es más costoso, es necesario conservarlo por más tiempo. Es indispensable conocer tu café y de esta manera podrás combinarlo con un buen empaque”, afirma. 

En su caso, Ronaldo empaca los cafés en latas selladas para conservar por más tiempo sus cualidades de aroma y así evitar un envejecimiento prematuro. 

Tostador de café

¿Deben usar las cafeterías empaques que conserven el café por más tiempo?

“El empaque, al final, también depende del cuidado que le den los mismos consumidores. Si la bolsa no se cierra el café se puede contaminar, se puede oxidar. Una cafetería debería invertir en el empaque siempre y cuando sea rentable y cómodo para el consumidor, que promueva el consumo”, sostiene Juan José.

Adicionalmente, él considera importante invertir en productos más ecológicos y que promuevan la sostenibilidad. De esta forma, como empresa, pueden evitar generar tanto impacto ambiental.

“Es importante reconocer los tiempos en los que el café todavía se conserva fresco e indicarle al cliente cuando va a la tienda hasta qué momento el café todavía se conserva y las personas van a ser conscientes de que están llevando el café de la manera en la que la tienda se los está recomendando, sin alarmarse porque la fecha de tostado sea de una, dos semanas o un mes”, comenta Ronaldo.

Aunque muchas tiendas venden café “tostado a la orden”, lo más importante no es buscar impresionar pretendiendo tener cafés frescos sino promover la calidad. En ese sentido, el éxito de la oferta de cafés tostados no siempre está en el diseño del empaque sino en la comunicación con el consumidor final. 

El café es una industria que promueve, transforma y genera un sentido de comunidad. Por lo tanto, es importante educar a los clientes para acercarlos a un consumo de café más consciente donde se logre comunicar un sentido de calidad, explicando los principios de un buen café.

Como recomendación final, Ronaldo dice que, “además del empaque, es mejor almacenar el café en un sitio donde no haya mucha luz o humedad y cerrarlo siempre tratando de sacar la mayor cantidad de aire posible”. Esto, porque el oxígeno ayuda a que los compuestos del café tostado se oxiden mucho más rápido, sobre todo si es café molido, lo que al final puede generar sabores desagradables y con notas oxidadas.

Café tostado en bolsa

Es importante promover un mercado que se fije en la transparencia con los consumidores, que les muestre cómo se comporta el café y que les dé recomendaciones para aprovechar su café al máximo.

Si tienes tu café en frascos, latas, al vacío, en empaques con válvula desgasificadora o sin válvula es importante que conozcas su comportamiento y cómo tu manera de guardarlo influye sobre la calidad.

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Créditos de las fotos: José Alejandro Hernández. 

PDG Español

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